Cosas que sólo pasan en Colombia (y en Soacha también)

No debería sorprendernos el hecho de que dos alcaldes de Córdoba se hayan posesionado dentro de sus celdas en la cárcel La Picota, tampoco debería sorprendernos que esos personajes hayan resultado elegidos, porque en nuestro país esa y muchas otras cosas más son tan normales...

Puede que esto esté en cierta manera alejado del contexto de Soacha, pero si uno se pone a mirar las cosas con un poco más de detalle, se da cuenta que existen algunos puntos que de uno u otro modo nos tocan. Uno de los mandatarios pertenece al cuestionado Movimiento Político Afrovides, una abominación creada por el parapolítico Juan Carlos Martínez, que casualmente durante la contienda electoral del año pasado se caracterizó por enfrentar dificultades similares con cada uno de sus candidatos avalados a lo largo del país.

Soacha no fue ajena a eso, aunque la dificultad se vino a saber después de realizada la elección de la única Concejal que dicho movimiento logró hacer elegir en el municipio: Soraya Escobar. La hoy posesionada Concejal al parecer se encontraba inhabilitada debido a que en el momento de su inscripción como Candidata, durante la campaña, y aún después de resultar elegida,  ejerció funciones de carácter público en el Hospital Mario Gaitán Yanguas.

No soy quien para juzgar la facultad constitucional de la Concejal Escobar y tampoco quiero dar a entender que ella no sea una persona digna para ocupar el cargo para el cual fue elegida, sin embargo queda la duda por saber si en efecto esa inhabilidad existe o no, aunque no se puede olvidar que de acuerdo a lo que dice la ley, por los hechos antes mencionados, Escobar sí estaría inhabilitada.

Le corresponderá a nuestra irrisoria justicia (que permite posesionar como alcaldes a dos presos) establecer si en Soacha tenemos una Concejal que jurídicamente no puede estar en el Cabildo Municipal, y aunque pareciera que esto es un rifirrafe político que sólo le interesaría a los ancianos y a los personajes parroquianos que permanecen todo el día especulando sobre la política local frente a la Alcaldía o el los alrededores de la Plaza Principal bebiendo algún tipo de licor, lo cierto es que eso nos debe interesar a todos, seamos jóvenes, adultos o ancianos.